Capítulo 1 Teoría de la creatividad

Nadie enseña a nadie.

Todos aprendemos de todos.

La mente es la energía viva de nuestro ser. Todos, todos poseemos una mente con una increíble capacidad de imaginación y fantasía, al igual que con creatividad. Cualquier cosa observada, pasa a ser una abstracción creada por la mente, una simple semilla del pensamiento, y se puede afirmar que lo que la mente pueda concebir los demás sentidos lo pueden desarrollar.

Cuando miramos a nuestro alrededor, lo que nuestra mente estructura se convierte en una realidad, esto ayuda mucho a reflexionar sobre los ele mentos que se ven, pero en sí la mente no diferencia entre lo que es verdaderamente real y lo que imaginamos. Nuestra imaginación, de seguro, precisa distintos destinos aunque podrían ser los mismos caminos; es decir, nuestra imaginación puede llevarnos a diferentes mundos, aun desconocidos para nosotros. Nuestra imaginación puede construir alternativas para solucionar un problema contra los desafíos que se presentan. En otras palabras, nuestra imaginación puede originar ideas en cualquier situación turbulenta. Este proceso hace que la creatividad emerja de los oscuros rincones donde estuvo por mucho tiempo, entonces, para ser creativos, debe dejarse volar la imaginación, la cual va a ampliar nuestras posibilidades y permitirá aprovechar el verdadero potencial con que se cuenta. La creatividad e imaginación es desechar eso que tanto tiempo nos han dicho: «¡No puedes hacer eso!» y «¡Ni lo pienses!». Por tanto, hemos crecido de manera condicionada a rechazar nuevas ideas y dejar de lado ideas que provienen de nuestra imaginación. Por ello potenciar el pensamiento creativo es un gran paso para crear las experiencias y la vida que se desea.

La creatividad está en todas las personas, pero no todas son creativas. Algunas la han desarrollado más, y a ellas el resto las considera genios; ¿lo son?, lo cierto es que la creatividad es posible potenciarla, especialmente desde el aula de clase. No sobra realizar ciertos ejercicios que ayudan en algún grado al desarrollo de habilidades, actitudes y competencias.

Desde épocas remotas existe preocupación por el desarrollo de habilidades de pensamiento: que los estudiantes aprendan a pensar y que los docentes enseñen pensando. Ciertos docentes e investigadores han caído en la cuenta de este fenómeno, pero el problema está en cómo hacer para cambiar el enfoque tradicionalista de repetir lo que se recibe (memorizar), cómo cambiar el proceso para que la persona construya por sí mismo su aprendizaje y, por ende, sus significados. El avance de las tecnologías de la información facilitan programas y modelos en computador para que el aprendiz centre su atención en el significado; pero estos programas están más enfocados a la enseñanza y, obviamente, primero debe surgir un cambio en el docente, porque él es el modelo, porque él puede activar procesos cognitivos. Los docentes tenemos dificultades en comprender lo que significa estar en el salón de clase y aprender. Esto es un problema de disciplina y de motivación; por tanto, hay que cambiar el estilo de docencia, propiciando que el estudiante piense y se motive, para que deje de ser un problema de disciplina y se incorpore a la clase de manera entusiasta y constructiva. En este contexto, muchos docentes y directivos se preocupan al ver cómo la educación se deteriora cada vez más y se convierte en un fábrica de títulos, para avalar ante la sociedad que tú sabes algo, pero en el fondo hay una incógnita: ¿cuánto sabe la persona? y sobre todo: ¿qué sabe hacer?

La educación debe tener un propósito pragmático, debería dedicarse a ayudar al aprendiz a desarrollar habilidades para hacer cosas útiles. Hacer las cosas que se desean y que se imaginan es un beneficio para la sociedad. La importancia de aprender está en hacer las cosas de mejor forma cada vez.

La educación tradicional debe cambiar. Enseñar a aprender a pensar debería ser el principal objetivo. Se necesitan nuevas ideas; es decir, «pensar». No hay reglas formales para ello, y aunque lo mejor es comenzar en la niñez, puede darse como lo dice algún adagio: «nunca es tarde para empezar». ¿Qué les sucede a los aprendices que hacen demasiadas preguntas? Es común oír a los docentes quejarse de no tener tiempo suficiente para responderlas; deben cumplir un programa. Las preguntas, de seguro, son la base para la generación de grandes ideas; sin embargo, a los niños que hacen muchas preguntas «buenas» se les diagnostica hiperactivos y se les aconseja cambiar de institución. Hay instituciones para niños «superdotados»1.

La educación debe llevar a los estudiantes a reinventar su propio mundo, así verán estimulados. Tendencias pedagógicas plantean estrategias para mejorar el ambiente en las relaciones estudiante–docente, con el fin de que el estudiante se sienta satisfecho en lo que aprende y el docente dé una orientación adecuada. Tendencias psicopedagógicas de los últimos años, constructivismo, escuela activa, escuela nueva,..., explicitan la necesidad de que el estudiante interactúe con el entorno para un aprendizaje real y más duradero; para ello es necesario que el docente también tenga ese interés.

La clave de la educación y del conocimiento de las personas es preguntarse cosas acerca del conocimiento. Por ejemplo, el tema de la derivada, el estudiante lo aprende de forma recitativa: la derivada de x a la n es: n por x a la n-1; la derivada del seno es el coseno,... Estos lo aprende de una manera memorística y los devuelve tal cual. En cambio, si la derivada se plantea de manera metodológica diferente, y se hacen preguntas acerca de ese contenido (cuál es el propósito de la derivada, qué fin tiene, la aportación a la carrera), las mismas que el estudiante pueda generar respecto al tema, van a surgir preguntas que arrojan información. Y no una información sin sentido.

No es fácil cambiar cómo dar una clase, cómo estar en clase activamente, cómo hacer del aula un lugar más dinámico, más pensante, más divergente; es una transformación muy fuerte. Quizás para que el docente transforme su práctica docente y su estilo de dar clases, algo en él debe cambiar: por ejemplo, ver de otra manera el mismo aprendizaje, ver cómo aprende él. Y el docente que de veras se sintoniza y entra en ese proceso descubre un mundo interesante se inicia en la creatividad.

Los procesos educativos deben plantear estrategias para mejorar el ambiente en las relaciones estudiante docente, esto con el fin de que el estudiante se sienta satisfecho con lo que aprende y el docente proyecte el conocimiento.

Estas páginas buscan ofrecer una serie de cuestionamientos, conocimiento y sugerencias para todos los que se dedican a educar en, por y para la creatividad. Cómo cambiar a un proceso en que la persona defina sus métodos de aprendizaje, construya y de significado a lo que ve o recibe según el contexto y la aplicabilidad posible que descubre.

Las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TIC) se han introducido en los procesos de enseñanza y mediante programas y modelos en computador se busca cumplir con lo anterior; sin embargo, en muchos casos no se pueden explicar las dificultades para comprender lo que significa o no se lee bien. Es un problema de disciplina y de motivación del pensamiento; por tanto, hay que cambiar el estilo haciendo que la persona piense y se motive, para que construya a su manera el conocimiento.

1.1 Conceptos

Hoy, la creatividad es una habilidad crítica dadas las características de complejidad, incertidumbre, turbulencia y cambios que caracterizan al mundo del trabajo y a la sociedad. Estar preparado para solucionar problemas de forma creativa es, sin duda, algo indispensable en este escenario, donde «innovar» es la palabra de orden.

Para desarrollar la creatividad existen ejercicios que buscan transformar la mentalidad y los procesos cerebrales en las personas, para ayudarles a aprender de un modo nuevo. Con la creatividad se funde educación (tradición) y curiosidad (imaginación e innovación); es una integración para cambiar el aprendizaje y hacer que los estudiantes sean efectivos creadores en todo. De modo que educar en la creatividad es educar para el cambio y formar personas ricas en originalidad, flexibilidad, visión futura, iniciativa, confianza, amantes de los riesgos y listas para afrontar los obstáculos y problemas que van presentándose en su vida profesional y cotidiana, además de ofrecerles herramientas para la innovación.

* Plantee una situación problémica.

* Halle distintas soluciones.

* Proyecte cada una de esas soluciones.

La creatividad se ha ligado de manera exclusiva al arte. Los escultores y los pintores experimentan con los materiales; los actores con la actuación en el escenario; el escritor con sus ensayos, poesías,... Pero no sólo existe la creatividad en lo artístico, también se halla y existen muchas muestras en los campos sociales, científicos, tecnológicos y empresariales.

La creatividad se estudia desde diferentes enfoques, con distintos objetivos, aplicando técnicas variadas. La creatividad es una característica innata de la persona para innovar: se confunde con la inteligencia, parece un proceso raro, se mira como un nivel mayor de la curiosidad, es la perspectiva de ver los objetos de manera diferente, pero la más generalizada es la que se considera como sinónimo de una capacidad extraordinaria para resolver problemas2.

Creatividad es el potencial humano integrado por los componentes cognoscitivos, afectivos, intelectuales y volitivos, que manifestado en un ambiente se presenta para generar productos novedosos y de gran valor social, para comunicarlos y que trascienden en determinados momentos.

Cabe destacar que creatividad y solución de problemas no son sinónimas. La sola visión de un problema ya es un acto creativo.

El interés de la ciencia cognitiva y de otras ciencias por comprender la percepción, la cognición, la aprehensión, como otros mecanismos que estimulan o bloquean la imaginación y la inteligencia, hace emerger la necesidad de encontrar elementos que contribuyan a generar cambios en el desarrollo del ser humano creativo3.

* Mire a lo lejos.

* Piense en las características de algún objeto.

* Realice una descripción.

* Revise la descripción hecha.

Uno de los pioneros del fascinante esfuerzo por enseñar a ser creativos es el escritor británico GRAHAM WALLAS, con su libro El arte del pensamiento, escrito en 1926; propuso el siguiente paradigma: el proceso creativo consta de cinco partes: preparación, incubación, iluminación, formulación y verificación [Romo, 1997].

Preparación: es el momento en que se revisan y exploran las características de los problemas. Se piensa con atención para conocer sobre lo que se quiere intervenir. Es la búsqueda, ensayo y tanteo, es también un proceso de aproximación, adquisición de ideas, conocimiento y recursos. Es ser curioso y desarrollo de la capacidad para trabajar una misma idea, una y otra vez.

Incubación: se establecen relaciones, se plantean posibles vías y estrategias de solución, debidamente evaluadas. Es la etapa para ejercitar el pensamiento creativo; se utilizan analogías, metáforas, contextos que nacen de la imaginación o la fantasía empleando imágenes y símbolos.

Iluminación: una idea grande aparece de manera súbita y, por lo general, es la clave solución al problema, o por lo menos un indicio amplio. Es el momento de concepción, en donde repentinamente se contempla la idea más clara que el agua.

Formulación y verificación: es organizar las ideas en un sentido lógico. Se elabora sistemáticamente el diseño de trabajo, se pone en práctica lo imaginado. Por lo regular hay un abismo entre concebir y ejecutar. Es la estructuración final del proceso en la que se pretende poner en acción la idea para cumplir el objetivo cuando fue concebida; es el parámetro para confirmar si realmente la idea creativa es efectiva o sólo fue un ejercicio mental. La exploración y la experimentación facilitan interactuar para búscar soluciones, el enriquecimiento perceptual, mejores operaciones mentales, procesos de construcción, estructuración y análisis de contenidos.

* Realice una historia con lenguaje simbólico.

* Determine los errores.

La creatividad no es un fenómeno simple, por el contrario, es dinámico, complejo4 y multifacético, dependiendo para su expresión tanto de factores del individuo, como de estilos de pensamiento, forma de abordar la resolución de problemas, rasgos de personalidad y motivación, así como las condiciones favorables en el contexto: la familia, la escuela y el trabajo.

Estudios sobre creatividad realizados por GUILFORD, TORRANCE, THURSTONE, MAYER y otros, hacia los años cincuenta, pusieron énfasis en el desarrollo del pensamiento creativo. Todos plantearon pruebas para evaluarlo.

GUILFORD postuló la diferencia entre el pensamiento convergente y el divergente, equiparando el primero a lo que es el pensamiento lógico y el segundo al creativo; además, la creatividad en sentido amplio se refiere a las aptitudes características de los individuos creadores, como son la fluidez, la flexibilidad, la originalidad y prospectiva [Nickerson, 1994].

* Seleccione una imagen especial.

* Analice los elementos que la componen.

* Determine qué usos tiene.

TORRANCE [Romo, 1997] la define como un proceso de percibir elementos que no encajan o que faltan; de formular ideas o hipótesis sobre éstos, de probar estas hipótesis y de comunicar los resultados, tal vez modificando y volviendo a comprobarlas. Las pruebas de TORRANCE plantean a los educadores el reto de cómo estimular la creatividad, qué estímulos son más eficientes, cuándo y dónde aplicar.

THURSTONE [Rodríguez, 1991] opina que la creatividad es un proceso de formar ideas o hipótesis, verificarlas y comunicar los resultados, suponiendo que el producto sea algo nuevo.

MAYER [1986] define creatividad como una actividad cognitiva que tiene como resultado nuevas soluciones a un problema.

Pero también debe considerarse que la creatividad no está solo en la diferencia de «hacer» sino de «ver» las cosas, aunque se vislumbra mucho cuando se puede convertir lo extraño en común, es decir, nace cuando es posible dar un salto de lo repetitivo a lo innovativo, en otras palabras, es una forma particular de sentir, de pensar y de mirar la realidad, por eso ser creativos es mirar desde otro punto de vista.

Existen otros enfoques. EDWARD DE BONO propone ver los problemas como reto a la imaginación. Para ello plantea que se empleen herramientas como las analogías, las metáforas y la intuición5; esto lleva a modificar la actitud ante los problemas y a la generación de estrategias hacia una solución, encontrando dificultades. Porque no nos educaron para solucionar problemas, sino para crearlos. DE BONO [1996] dice: La creatividad, por ser una forma de pensamiento, puede ser aprendida y desarrollada. Desde su punto de vista, creatividad e ingenio son direcciones que han de tener los procesos del pensamiento para exaltar la inteligencia6.

En toda disciplina, el ingenio es indispensable.

Lo único que interfiere con mi aprendizaje, es la educación.

Albert Einstein.

También, se determina que hay factores emocionales y afectivos que inhiben el empleo de toda la potencialidad que se tiene. En general, no se tiene claro cuál es nuestra visión del mundo, qué misión puede cumplirse, qué aporte puede darse. Lo cual indica la necesidad de tener una actitud creativa para armonizar las diferentes facetas de la vida, para clarificar el norte y fuerza de coherencia con lo hallado. Todos tenemos capacidades hacia polos opuestos (la ternura y la crueldad, lo generoso y lo hosco, lo alto y lo bajo) y por no saber manejar la lucha dentro de nosotros, nos dirigimos hacia lo no adecuado.

Luego, es más importante la motivación intrínseca que la extrínseca, en virtud de que una vivencia creativa está asociada con una sensación de placer, de entusiasmo y satisfacción, entonces debe surgir el amor por explorar y descubrir. Lo emocional, en términos metafóricos, es como el combustible que necesita un proceso mental; existen operaciones automatizadas en el ser humano; sin embargo, existen procesos cognitivos que necesitan una mayor energía para actuar como sistema desencadenante de procesos creativos [Jiménez, 1998]. De esto se deriva que la creatividad es un proceso que tiene por objeto combinar el conocimiento adquirido en formas no conocidas, con la finalidad de seleccionar de entre ellas las posibles soluciones efectivas para un problema dado.

* Identifique un objeto.

* Determine sus posibles usos.

Taylor [Citado en Marín, 1991], gran investigador, con el fin de entender mejor lo que es, determinó cinco niveles de creatividad.

1. Nivel expresivo: se relaciona con el descubrimiento de nuevas formas de expresar sentimientos, es un medio de comunicación consigo mismo y con el ambiente7.

2. Nivel productivo: es el que incrementa técnicas para la ejecución; surge mayor preocupación por el número que por la forma y el contenido.

3. Nivel inventivo: se despierta la capacidad para descubrir nuevas realidades; emerge la flexibilidad perceptiva para detectar nuevas relaciones.

4. Nivel innovador: se modifican los principios básicos que fundamentan el sistema al cual pertenece el objeto creado. Existe originalidad, es práctica.

5. Nivel emergente: presupone la creación de principios nuevos. Es teórico. Sin embargo, Rodari [1996] dice: Uno no crea, tan sólo transforma lo que alguna vez ha visto o sentido, no hay nada original, todo es transformación de las formas de la naturaleza8.

1.2 Bases

La creatividad es una cualidad que todos poseemos en algún grado y puede potenciarse mediante adiestramiento y práctica. La manipulación de los objetos desde edades tempranas constituye un acto de creatividad. Pero la creatividad no sólo implica la utilización de operadores mentales con lógica y racionalidad, sino que es un acto humano atravesado por muchos efectos para comprender el mundo físico con un goce estético.

Creatividad significa la capacidad de imaginar algo nuevo y original e idear la forma en que puede expresar a los demás [Amegan, 1993]. Todo lo nuevo y original que se produce es creativo, es decir, es la capacidad de crear o transformar cosas de una manera no conocida antes, utilizando los recursos disponibles. Pero, además a los recursos disponibles se les debe conocer para qué más sirven y cómo podría variarse su uso. Podría ser curiosidad o imaginación pero estas la complementan. Para crecer y crear, es preciso tener fe en uno mismo.

* Enuncie tres ideas para construir un puente movible.

* Evalúe y mejore esas ideas.

La creatividad hace nacer el estado de espíritu de investigación, y la innovación es el resultado.

Los problemas existen en el quehacer cotidiano, problemas psicológicos, sociales, neurológicos, profesionales, económicos o sentimentales; la creatividad se manifiesta cuando se le solucionan de una forma nueva. Una vez solucionado un problema, ¿cuándo se busca si existe otra solución?

No basta tener buenas ideas, es necesario saber expresarlas, y esta expresión ha de ser holística, de manera que integre la expresión corporal, oral, escrita, plástica, manual y simbólica. Cada uno tiene un stock de ideas. Una especie de fuente subterránea donde siempre se puede ir a beber [Gardner, 1995]9.

Para captar la realidad en toda la extensión y profundidad se necesita contar con un pensamiento diferente: la imaginación y la inteligencia10. Para que una persona tenga ideas creativas, es necesario que ejercite su mundo mediante la expresión de sensaciones y sentimientos; su imaginación y pensamiento; y la identificación del ambiente. Esto es, tenga «buena» capacidad de reflexión, razonamiento, descripción, esquematización... Así como el hierro se oxida cuando no se usa, y el agua estancada se pudre, así nuestro intelecto se pierde cuando dejamos de usarlo.

* Descubra una obra artística en su comunidad.

* Determine en ella rasgos característicos.

Captar la realidad supone recorrer un largo camino en el que surgen ideas, dibujos, esquemas, proyectos, esbozos, dudas. Pero por cada uno de ellos, se debe razonar: por qué así, cómo mejorarlo, por qué esta duda.

La naturaleza ofrece la posibilidad de crear su propia realidad; todo pensamiento es una abstracción que no puede cubrir la totalidad de la realidad. Es necesario considerar los procesos de pensamiento que conducen a la abstracción, teniendo en cuenta que el punto de partida es la propia acción y que la manipulación tiene la función de soporte para la elaboración, la reflexión y la generalización.

La naturaleza es determinante para que la creatividad aparezca. La curiosidad enfocada hacia ciertas partes ha permitido mejorar algunos procesos, crear herramientas, máquinas, métodos y, sobre todo, nuestro cuerpo. Desde los primeros años de vida, la curiosidad es parte para una continua exploración.

El pensamiento es la facultad de pensar. Saber pensar requiere una habilidad intelectual de reflexión, razonamiento, de síntesis... la búsqueda incesante del conocimiento es el motor del espíritu creativo. Evidentemente, el espíritu creativo es lo que lo motiva a usted a leer este texto.

Muchas veces lo que se busca está frente a nuestros ojos, lo que se necesita es mirar de otra manera para encontrarlo.

La intuición es una percepción interior que lleva a comportarnos de determinada manera. Esto, en términos comunes, dice: «a la gente creativa no se le enseña nada para que cree, se le estimula». El futuro de un profesional no está en el conocimiento adquirido, sino en el manejo creativo del mismo. Una idea nueva, al igual que la mancha de aceite, tiende a extenderse, a proyectarse, a hacerse patente mediante la expresión. La persona creativa recrea, cambia, reorganiza, redefine contenidos poseídos. Sabe mirar y extraer del entorno aquella información o idea que precisa para su plan. Las variaciones sobre un tema son la esencia de la imaginación.

Al dedicarnos con pasión a un área de interés más allá del trabajo y de la familia, estamos ampliando nuestras perspectivas y enriqueciendo todas las facetas de nuestra vida. El trabajo es una experiencia que debe estudiarse atenta y críticamente y, con el tiempo, examinarse a través de la propia experiencia [Torrance, 1977].

A pesar de los errores, los desastres, los fracasos y las frustraciones nunca se deja de aprender, nunca se debe dejar de explorar y de experimentar en la búsqueda de conocimiento. Piense por un momento en la forma como usted ha aprendido lo que sabe.

Una actitud de búsqueda permanente, de compromiso con lo que parece imposible, permite atreverse a romper esquemas, a construir una capacidad de soñar, de arriesgar y de cambiar hacia la creatividad. No plantear retos, buscar lo fácil, paralizarse ante un problema, impide desarrollar adecuados niveles de tolerancia a la frustración. Si no existe afectividad y amor en los procesos de desarrollo humano, no existe la posibilidad de ser creativos [Jiménez, 1998].

* Seleccione un tema de la asignatura.

* Determine las alternativas de enfoque.

* Describa las posibilidades de integración con otras asignaturas.

* Plantee por lo menos una aplicabilidad para la vida.

1.3 Acciones

El estudio sobre aprendizaje desde la psicología, la determinación de cómo son los procesos de percepción y cognición11 desde la neurología e inteligencia artificial, han sido fundamentales en el estudio del pensamiento humano; sin embargo, aprender conceptos es sólo una situación para producir conocimiento. Esto ha favorecido el desarrollo de «sistemas inteligentes»; y de allí, ante los diversos inconvenientes y restricciones, se ha profundizado en psicología cognitiva en cómo son los diferentes procesos en nuestro cerebro. «La creatividad es una necesidad primaria y su ausencia produce un estado general de insatisfacción y aburrimiento».

Luego, puede afirmarse que la creatividad no es una actividad sino una serie de operaciones cognitivas y emociones que impulsan procesos asociativos e imaginativos en los que actúa la experiencia del individuo para provocar transformaciones sobre los objetos o los sujetos. La creatividad, mirada así, puede sustentarse en los límites porosos de la inteligencia, en los procesos neuronales, en los procesos culturales; pero, en últimas, estos factores por sí solos no producen ningún tipo de creatividad.

La creatividad es el resultado de la combinación de diferentes planos y procesos del pensamiento; es decir, de procesos racionales que obedecen a las reglas de la lógica y de la heurística y que están, de una u otra forma, ligados a la experiencia.